Una Escuela con mucha historia…
Los orígenes de la Escuela de Música quedan unidos a los de la Sociedad Filarmónica Alteanense que en 1889 realiza su primer a actuación pública. Desde los inicios la Entidad ha impartido las enseñanzas de solfeo e instrumento a aquellos educandos que después iban a formar parte de la banda de música de Altea.
No obstante ello, es en 1915 cuando la banda de música cobra especial importancia, se constituye oficialmente con el nombre de Sociedad Filarmónica Alteanense y se aprueban los primeros estatutos de la Entidad, especificando, entro otros puntos, la forma de acceso y normas generales de su escuela de educandos.
Numerosos profesores y directores han pasado por la Escuela a lo largo de su existencia, pero fue bajo la dirección de D. Francisco Pérez Devesa cuando la escuela sufre un cambio importante, pues en 1970 la escuela de educandos, en aquel entonces denominada “Benjamín Palencia”, adquiere importancia en la educación musical de la provincia, instaurando así la base de la enseñanza musical reglada en nuestra población.
Dieciocho años más tarde, en 1988, la escuela sufre un nuevo cambio relevante, ahora bajo la dirección de Jesús Juan Oriola, la escuela pasa a ser un Centro Reconocido de Grado Elemental por la Conselleria de Educación y dependiente del Conservatorio Superior Oscar Esplá de Alicante.
A pesar de los logros y avances conseguidos en cuanto a la educación musical de nuestra localidad, la Filarmónica busca un nuevo objetivo, que trata de obtener las enseñanzas de Grado Medio para Altea. Es pues en 1997, cuando la Filarmónica consigue finalmente la constitución del Conservatorio de Grado Medio de Altea, auspiciado por el Ayuntamiento de Altea, que inicia su primer curso académico 1997/98.
Durante varios cursos académicos, el nuevo Conservatorio y la Filarmónica Alteanense siguen conviviendo juntos, compartiendo tareas e instalaciones en el mismo edificio de la calle de la Filarmónica, pero por motivos de espacio, en 2003 se separan, trasladando el Conservatorio al edificio del antiguo grupo escolar.
La Escuela en la actualidad
En 2005 la escuela de la Filarmónica recobra un nuevo impulso debido a la gran demanda y es cuando, bajo el nombre de Escuela de Música y Danza de Altea (EsMuAltea), y con una nueva concesión de la Conselleria de Educación de la Generalitat Valenciana como centro reconocido para enseñanzas elementales, la escuela se especializa, además de la enseñanza elemental de música, en la enseñanza elemental de danza, así como en jardín musical. Asimismo, a parte de las especialidades instrumentales habituales, la escuela ha ido añadiendo progresivamente en su oferta educativa aquellas especialidades inexistentes en el Conservatorio y demandadas por el alumnado, tales como fagot, bandurria, laúd, mandolina, contrabajo, dulzaina y tamboril.
Como no, el principal objetivo de la Escuela es atender la amplía demanda musical con la finalidad de despertar vocaciones y aptitudes que desemboquen en el desarrollo personal y musical y, si procede, en el acceso a las agrupaciones existentes de la Filarmónica o de nueva creación.
En la actualidad, la Escuela cuenta con más de 25 especialidades y 24 profesores para impartir clase a los más de 320 alumnos de media que se encuentran matriculados en el centro, distribuidos entre todos las modalidades de enseñanza (música, danza e iniciación).
La Sociedad Filarmónica Alteanense puede sentirse satisfecha de todos los logros y frutos obtenidos, pues numerosos alumnos de la escuela de la Filarmónica estan actualmente en importantes puestos nacionales e internacionales, e incluso la práctica totalidad del profesorado del Conservatorio de Altea fueron alumnos de la escuela de la Filarmónica.
Un repunte histórico sobre las diversas ubicaciones que ha tenido la Escuela…
Durante sus más de cien años de existencia, la Filarmónica ha utilizado los más heterogéneos lugares del municipio para los dos acometidos principales de la Entidad, la enseñanza y los ensayos de la banda, que en numerosas ocasiones han debido estar en lugares separados, y de entre los que cabe destacar el propio domicilio del maestro Pérez en el carrer La Mar (1901-1910), la edificación en la playa de Altea para las actividades de música y teatro de la localidad (1910-1922), el nuevo domicilio del maestro Pérez en la Costera de la Morera (hoy denominada “Costera del Mestre” en honor al maestro Pérez) (1922-1934), en el piso alto de la panadería de Teresa Llinares en la calle La Cequia (1936-1945), dependencias de viejo Ayuntamiento en la Plaza del Convent (1945-1968), segunda planta del nuevo Ayuntamiento en la plaza de la Paz (actualmente plaza José Mª Planelles) (1968-1987), hasta las actuales instalaciones en la calle de la Filarmónica (antiguamente denominada calle Ingeniero Muñoz), las cuales han sufrido varias remodelaciones, ampliaciones y reformas, de las que se destacan las de 1991 en la que se inaugura el nuevo edificio destinado a los ensayos de las agrupaciones, oficinas, archivo y sala de juntas; y las de 2011 en las que se inaugura el nuevo edificio destinado al aulario de la Escuela de Música y Danza.